Las Cofradías de la Preciosísima Sangre de Jesús parece que tuvieron su origen durante el siglo XIII quizás por influencia de los Caballeros Templarios. Se expandieron por tierras españolas, especialmente en el Reino de Valencia. En la ciudad de Valencia había una Cofradía de la Soledad que consta que ya existía en 1535, siendo D. Luís de Vilanova uno de los primeros Priores.
Los Vilanova fueron Señores de la Baronía de Castalla desde que el rey Pedro IV de Aragón hizo la enfeudación a favor de D. Ramón de Vilanova en el año 1362, del castillo y la villa de Castalla.
Un siglo antes, esto en el siglo XIII y tras la Reconquista de el rey Jaime I, fue erigida la actual ermita como iglesia parroquial de Ibi, Tibi, Onil y Castalla siendo dedicada a la Asunción de Nuestra Señora. En el año 1473 se le cambió la dedicación pasando a denominarse de la Natividad de Nuestra Señora. Cuando se trasladó a la nueva Iglesia la primitiva parroquia en 1571, se quedó ésta sin fondos para su sostenimiento. Para remediar esto, decidieron los Señores de Castalla, junto con las autoridades y vecinos y asesorados por el entonces arzobispo de Valencia, Ilmo. Sr. D. Juan de Ribera, instituir una Cofradía (igual a la que habían fundado la familia Vilanova en Valencia y varias poblaciones más de la archidiocesis valenciana), bajo la advocación de la Purísima Sangre de Nuestro Señor Jesús. Redactaron los estatutos que fueron presentados al prelado de la diócesis, el que con posterioridad fue San Juan de Ribera, que los aprobó y firmó el día 15 de julio de 1577 en Alcoy, donde se encontraba realizando una visita pastoral.

La Ermita de la Sang
El 21 de marzo de 1585 el Papa Sixto V le concedió una bula a la Cofradía de la Sangre para “que cada uno de los fieles cuyos méritos son nada respecto de sus deméritos para ejercitarse en obras piadosas y meritorias, deben ser ayudados o favorecidos con dones espirituales, con indulgencia y perdón de pecados, a fin de que merezcan llegar con mayor facilidad a los goces de la felicidad divina”.
Los fines de la nueva Cofradía de la Preciosísima Sangre de Jesús era, además de recaudar fondos para la Ermita, el culto a la Pasión y las Procesiones penitenciales, pedir sufragios en épocas de calamidades públicas, servidumbre caritativa a enfermos y moribundos, acompañar en los entierros a los cofrades y a los pobres de solemnidad y otras obras de misericordia. En las Actas de la Cofradía se establecía la obligación de hacer las procesiones de Semana Santa; el orden en que tenían que salir las imágenes y los gremios etc.
El Vellet
En la actualidad la Cofradía, además de mantener algunos de los gastos ordinarios de la Ermita y todos los concernientes a la Casa dels Majordoms, su sede, organiza junto a la parroquia las procesiones de Semana Santa y Pascua así como la fiesta del Bouet de la Sang, que se celebra el primer sábado de julio; cuida, vela y mantiene algunas de las imágenes que participan en las procesiones y colabora y ayuda a otros grupos y organizaciones en diversas obras de caridad.
Hoy, la Cofradía la forman diez grupos, tradicionalmente llamados cuadrillas, con un total de 290 cofrades, regida por una Junta Directiva compuesta por el Cura Párroco o Prior, el Clavario, tres Viceclavarios, un Secretario y vicesecretario, un Tesorero y vicetesorero, y tres representantes de cada uno de los grupos.
Anualmente cada cofrade paga una cuota —que establece la Junta Directiva- para cubrir los gastos de mantenimiento de locales y Ermita, restauración, conservación y, en su caso, adquisición de ornamentos, tronos e imágenes, así como la celebración de diversos actos relacionados con las actividades de la Cofradía.
casa dels mojordoms


